San Benito

11/7/09






Hoy es la fiesta del padre del monacato occidental, San Benito de Nursia. Comprobando el moribundo estado del cristianismo en la mayoría de países europeos debiéramos volver la mirada sobre San Benito y la orden religiosa que él fundó, los Benedictinos. Europa sin monasterios y catedrales sería otra cosa pero no sería Europa. La importancia religiosa y cultural de los monjes y monjas ha sido tan grande que, repito, sin ellos Europa no sería Europa.
San Benito de Nursia escribió una regla, la regla benedictina, para regular y organizar la vida de las comunidades de su Orden. Esta regla contiene una máxima que bien podríamos hacer nuestra, dice así , "No antepongáis nada al amor de Cristo". No anteponer nada a Cristo es también hacerlo todo por y para Cristo. Ese "nada" y ese "todo" debiera ser una constante en nuestra vida para mayor gloria de Dios. Ojalá la gentes de hoy tengan esa actitud de desprendimiento de un monje, esa actitud de búsqueda de la Verdad que nos hace libres, esa mirada limpia que en todos ha de ver a Cristo, ese deseo inmenso de encontrar, adorar y transmitir a Dios. La liturgia es el carisma particular de la Orden Benedictina, desde la clausura de sus monasterio la belleza del Culto es sublime, se cuida hasta el mínimo detalle para dar a Dios el culto más excelso, la oración más hermosa. Todo cristiano debiera participar alguna vez de la Misa en un monasterio benedictino, no quedará indeferente.


1 comentarios:

Angelo dijo...

Me encanta todo lo relacionado con la vida monástica. Tan solo ver estas fotografias mi alma siente una gran paz. Le invito a preparar la noche del 24 en un símbolo de unión al papa y a los blogueros. Un saludo