Es Él mismo

11/6/09


En la Sagrada Eucaristía está realmente Cristo, en cuerpo, en alma, en divinidad, todo su ser está presente en el pan y vino consagrados, transubstanciados. Es Él mismo. El mismo Dios que siempre ha existido en la segunda persona de la Trinidad Santísima, el mismo que hace más de veinte siglos se hizo carne en el vientre de María, el mismo que nos redimió en la Cruz, el mismo que resucitó de entre los muertos. Si tomásemos un poco de consciencia de esta realidad, qué fructíferas serían nuestras visitas al sagrario, nuestra participación en la Misa, qué sublime el momento de comulgar, qué acompañados y amados nos sentiríamos, qué gran Amigo habríamos encontrado, qué necesidad de buscarlo, tratarlo y adorarlo tendríamos. Decimos que creemos que es Él, pero nos falta fe, convencimiento, certidumbre. Pidamos a Cristo sacramentado que aumente nuestra fe en su presencia real en la Sagrada Hostia y que aumente nuestra piedad eucarística.

1 comentarios:

ARCENDO dijo...

Me encanta tu blog, es un compendio de sabiduria de la buena, inspirada por el Espíritu. Con tu permiso paso a enlazarte entre mis favoritos. Un saludo.