Para reflexionar:
" Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.
Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen.
Escucharía cuando los demás hablan, y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate!
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto, no solamente mi cuerpo sino mi alma.
Dios mío, si yo tuviera un corazón, escribiría mi odio sobre el hielo, y esperaría a que saliera el sol. Pintaría con un sueño de Van Gogh sobre las estrellas un poema de Benedetti, y una canción de Serrat seria la serenata que le ofrecería a la luna.
Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos...
Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida... No dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que quiero, que la quiero.
Convencería a cada mujer u hombre de que son mis favoritos y viviría enamorado del amor.
A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse!
A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar.
¡A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres... He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada. He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por vez primera, el dedo de su padre, lo tiene atrapado para siempre. He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero realmente de mucho no habrán de servir, porque cuando me guarden dentro de esa maleta, infelizmente me estaré muriendo. "
Gabriel García Márquez.
La marioneta
9/7/07
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12 comentarios:
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.
Este es un buen pensamiento.
¿Cuantas cosas se pueden comprar con dinero? Muchas todas materiales.
¿Cuanto dinero vale lo que uno ama?
¿Se puede comprar con dinero la fe, el amor, la salud, un detalle regalado con amor, el recuerdo de momentos felices vividos junto a alguien?
¿Que precio tiene eso?
¿Acaso se puede comprar eso?
No, porque el valor es tan grande que es imposible comprarlo.
Eso se regala.
Me gustaría escribir en un blog que los post fueran de una mujer, para contrastar para ver las diferencias bien.
AHORA SI QUE DISCULPEN PERO EXCUSENME NO SE QUIEN PUSO ESE POEMA, PERO HAY UN ERROR EL AUTOR DEL POEMA NO ES GABRIEL GARCIA MARQUEZ, ES UN VENTRILOCUO MEXICANO, JOHNNY WELCH.
Es verdad, ese poema es de Johnny Welch! Es un gran poema, todo lo que uno no valora. Y pues ha sido un poema muy reconocido.
«La mies es mucha, y los obreros pocos. Rogad, pues, al dueño de la mies que envíe obreros a su mies. Id; mirad que os envío como corderos en medio de lobos. No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias. Y no saludéis a nadie en el camino.
Este texto del evangelio de hoy es para tí Ignacio, le pido a Dios que sepas ser siempre arcilla en manos de Dios y no de los hombres, menos de los lobos.
y los envió de dos en dos delante de sí.
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